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POETA ÁNGEL ANTONIO HERRERA

ÁNGEL ANTONIO HERRRERA

 

los espejos nocturnos

Es sabido, que las musas visitan las cunas de los guap@s.

Se conoce menos que también hacen actos de caridad visitando gratis a las y los feos: Sabina, Fito, Bingen Alcalde, etc…

¿O quizás sea aquello de que feos y feas se hacen poetas y cantautores para engatusar a los Apolos y las Musas más bellas?

O sea, a las mujeres y varones con ángel. Cual lo lleva en el nombre, éste, al que hoy invisto de tal: Ángel Herrera

UN ORFEBRE DE LA POESÍA MÁS QUE UN HERRERO 

¿Se han fijado en la fealdad de la mayoría de los músicos rockeros en general?

Feos de manual, salvo excepciones.

Justo lo contrario de ellas, las divas del Pop. Beyoncé, Shakira, Jennifer López y compañía

No me hagan demasiado caso. Es hablar por hablar. Una estupidez mía que anoto. Pues es igualmente cierto que los trovadores guapos triunfan de calle.

Metido ya el zanco, hasta el tuétano, en el jardín peculiar de las observaciones que he creído constatar en directo a lo largo de mi vida (deformación profesional de sociólogo),  si acaso, -y para salir con honor del embrollo- permítanme distinguir entre estrellas del rock y solistas del pop. Entre sólo músicos y cantantes. Éstos últimos suelen ser físicamente agraciados. La profesión lo requiere.

La belleza ayuda a la identificación y conexión emocionales. Es una ley humana que todas las entradas del blog recogen. 

Claro que, a unos y otros, el efecto halo del talento, hace que lleguemos a percibirlos atractivos. 

«Hay ojos que de legañas se enamoran»

 

A los efectos, del coloquio bobo que he iniciado y no sé concluir, una amiga me sorprendió una tarde, según paseábamos, afirmando ofendida que abundan en demasía las expresiones coloquiales con el calificativo de GUAPO y GUAPA. Y que deberían desterrarse de los diccionarios:

-Esto está muy guapo, colegas…

-Sí. Es una cosa guapa…

Etc… Sea como fuere, es el caso -a mi manera de ver- del fulano vate. Disculpen que me llamara tanto la atención. Lo cortés no quita lo valiente. Aunque no venga, para nada, a cuento respecto a la calidad de su obra poética. 

Además, tendrían que verme a mí… ¡De echar cohetes y escapar!  

Dejo ya esta besuguez. «Alea jacta est» No borraré lo escrito.

Leámoslo a él.  Oigamos su voz que la imagino bella y honda en todos los sentidos. Tal vez aprendamos de su arte, que les garantizo está tocado por las Sabinas..

 

De nuevo, se cumple el dicho de la sabiduría popular

¡¡ LAS APARIENCIAS ENGAÑAN !!

Máxime cuando del alma interior de cada persona se trata.

¡ Recordémoslo !

 

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